La preocupación por el incremento de la participación política de las mujeres llevó al PNUD, al Ministerio de la Mujer y la Equidad de Género y al Servicio Electoral de Chile a desarrollar un acuerdo conjunto para apoyar a los partidos a promover la participación política de las mujeres.


Desde hace algunos años se ha visto un creciente interés por la problemática de la subrepresentación que existe de mujeres en los cargos de elección popular. El año 2015, Chile se sumó a la iniciativa que venían adoptando múltiples países a nivel mundial, mediante la aprobación de la Ley 20.840 que incorporó el principio de equilibrio de género o cuotas electorales, estableciendo que en las listas de candidaturas para senadores/as y diputados/as, ningún sexo podrá superar el 60% de las nóminas. Por su parte, la Ley de partidos políticos promulgada el 2016 estableció que los órganos colegiados debían tener una conformación paritaria y que el 10% del financiamiento estatal que reciben debe ser destinado a actividades que promuevan la participación política de las mujeres.

A pesar de ello, las mujeres siguen estando subrepresentadas en los cargos de poder. Incluso luego de la aplicación de la Ley que establece cuotas electorales, ellas ocupan solo un 22,6% de la cámara baja y un 23,3% de la cámara de alta. Esta cifra es más preocupante en las alcaldías, donde alcanzan solo un 11,9% de dichos cargos.

El PNUD, el Ministerio de la Mujer y la Equidad de Género y l Servicio Electoral desarrollaron un acuerdo conjunto para apoyar a los partidos a promover la participación política de las mujeres. Para ello se invitó a las máximas autoridades de los 20 partidos políticos legalmente constituidos a firmar un Convenio de Colaboración Interinstitucional para Impulsar y Fortalecer la Participación de Mujeres en Política. 16 de ellos adhirieron a la iniciativa.

Desde entonces se han desarrollado una serie de acciones para sensibilizar, instalar el debate y generar medidas que permitan aumentar la participación política de las mujeres dentro de los partidos. Se realizaron talleres dirigidos a las y los integrantes de los partidos políticos, especialmente a las directivas y encargadas/os de género., con el objetivo de entregar herramientas teóricas y conceptuales para impulsar y fomentar su participación.

Paralelamente, se desarrolló una herramienta de autodiagnóstico para partidos políticos que ha permitido levantar una línea base sobre el cumplimiento de las normas dirigidas a la igualdad de género, así como de las medidas que hasta ahora han impulsado los partidos en esta temática. La herramienta permite a los partidos analizarse desde un enfoque de género para identificar las brechas y oportunidades existentes respecto a la promoción de la participación de las mujeres y de la igualdad de género (www.masmujeresmejorespartidos.cl).

A partir de este autodiagnóstico, cada partido elaborará un plan de acción que identificará las metas a alcanzar, las acciones necesarias para lograrlas, los y las responsables de llevarlas a cabo, los plazos y los recursos necesarios para ello.  

Sin duda, los desafíos y obstáculos para la participación de mujeres siguen estando presentes en el contexto nacional, sin embargo, iniciativas como estas buscan aportar al debate, reflexión y cambio de las prácticas que hoy marginan a las mujeres de la plena participación en política. Las mujeres representan más de un 50% de la población, de modo que, pensar una sociedad más justa implica entender que la exclusión de las mujeres en la deliberación y toma de decisiones afecta la calidad y legitimidad del sistema democrático. Así, mientras más mujeres ocupen cargos de poder, se hace más probable que sus voces sean escuchadas y que las desigualdades de género sean parte de la agenda pública.