La crisis por la pandemia COVID-19 no es solo una crisis sanitaria, sino de desarrollo humano.  El PNUD estima que por primera vez llevará a una caída del Índice de Desarrollo Humano. Además, la emergencia llega en un momento de desaceleración económica para muchos países. Por ello, es fundamental un esfuerzo por reactivar la economía, no solo para regresar a donde nos encontrábamos, sino hacia una reconstrucción mejor para los medios de vida la población y, particularmente, para las MYPES.

¿Por qué enfocarnos en las MYPES? Se estima que más de 70% de las personas ocupadas trabajan en una MYPE. Estas personas ocupadas también son más vulnerables debido a los bajos niveles de protección social con las que cuentan. Este documento identifica esas desigualdades y propone 10 #IdeasParaLaAcción para minimizar el impacto dela pandemia.

El mercado laboral de nuestro país es desigual, especialmente para mujeres, jóvenes y población del área rural. La tasa de inactividad es mayor para estos grupos, y una de las mayores en Centroamérica. Estas diferencias también son evidentes a nivel de sectores económicos, siendo los más afectados comercio, industria manufacturera y transporte. Al interior de los sectores también es evidente que el incremento en el desempleo ha afectado de forma desigual a mujeres y hombres.

Disminuir el impacto de la crisis por COVID-19, reactivar la economía y reconstruirnos mejor, requiere una estrategia integral para la protección de las MYPES y para la recuperación de medios de vida. Partiendo de un análisis del contexto antes de la pandemia de COVID-19 e identificando las vulnerabilidades de las MYPES y de los medios de vida en este período de crisis, este documento provee insumos para Aprender de la crisis con 10 ideas para la acción.