El impacto del huracán Irma en Cuba fue enorme, como lo fueron otros desastres naturales en Cuba. Cientos de casas fueron afectadas, millones de personas fueron desplazadas y evacuadas. Frente a estos desastres, PNUD Cuba tienen proyectos de gestión del riesgo de desastres que permitan reaccionar y ayudar a las poblaciones rápidamente.
America Latina Genera, entrevistó a Ignacio Pérez González, Jefe de Relaciones Internacionales del Gobierno de Sancti Spíritus, Coordinador del proyecto FORSAT en la provincia.
ALG: ¿Por qué se decidió trabajar el tema de género como parte de la prevención y manejo del riesgo en Cuba?
Cuba cuenta con un reconocido Sistema de la Defensa Civil que trabaja para la prevención de riesgos ante diferentes peligros y fenómenos extremos, donde la presencia de la mujer en sus instituciones y en alianza con la Federación de Mujeres Cubanas siempre ha sido un sello distintivo.
En este contexto surge el proyecto FORSAT, el cual coordino en la provincia de Sancti Spíritus, y del que comparto un poquito de su historia.
Con motivo de las intensas lluvias del 2012 y de la evaluación de impacto de este fenómeno asociado a ciclones tropicales, la Agencia de Medio Ambiente y su Grupo de Evaluación de Riesgos realizó un informe donde se evidenció que las provincias con mayores afectaciones y vulnerabilidades eran Villa Clara y Santi Spíritus. De inmediato se propuso fortalecer los sistemas de alerta temprana en esta región central de Cuba y surge el proyecto de cooperación internacional FORSAT, con el objetivo de proteger cerca de 39 000 personas que viven en 15 comunidades alrededor de las cuencas Zaza y Agabama. En ese proyecto se involucran instituciones nacionales y los gobiernos territoriales de las provincias Villa Clara y Sancti Spiritus, entre ellos los municipios seleccionados, y era relevante que desde la propia formulación del proyecto se prestara atención al enfoque de género y se identificaran qué dimensiones de género y qué resultados trabajar en cuanto a la igualdad.
Como coordinador del Proyecto en Sancti Spíritus apoyé desde el inicio los esfuerzos por alcanzar los resultados previstos en cuanto a género y por hacer alianzas con instituciones como la Universidad y su Cátedra de la Mujer, que cuentan con profesionales especialistas en el tema y que tienen el reconocimiento de la sociedad para abordar el asunto desde esta perspectiva. Todo el tiempo tuvimos el acompañamiento del PNUD que también nos motivó en estos análisis.
Antes consideraba que era importante tratar las desigualdades entre hombres y mujeres en la reducción de riesgos de desastres; ahora estoy seguro de ello y contamos con herramientas para hacerlo. Nos falta mucho por andar, pero ya estamos en esa línea y se mantiene la decisión de trabajar el tema en todos nuestros proyectos y nuestro accionar.
Mi experiencia de trabajo por muchos años en el gobierno del municipio Sancti Spiritus y como miembro de la Comisión de Evacuación me permitió apreciar el comportamiento diferente entre hombres y mujeres a la hora de enfrentar la evacuación y posteriormente en el proceso de la recuperación.
ALG: ¿Por qué es importante trabajar a nivel municipal?
La práctica y el trabajo con la comunidad desde una perspectiva de género nos mostró que hombres y mujeres ante la situación de desastres asumen roles diferentes. Llegar a la base de los asuntos siempre influye en el resultado del trabajo que se realice. El proyecto ha llegado hasta 15 comunidades trabajando el enfoque participativo y de género para lograr elevar la percepción de riesgo en la población que se puede ver afectada ante el paso de eventos hidrometeorológicos extremos.
La Cátedra de la Mujer de la Universidad de Sancti Spiritus ha jugado un papel fundamental liderando el análisis de género a través de su trabajo comunitario y la sensibilización de actores que trabajan la reducción del riesgo. Ello ha favorecido las atenciones a las necesidades diferenciadas en la prevención y la respuesta al paso de los fenómenos extremos en los municipios donde se implementa el proyecto.
ALG: ¿Cómo se integró la perspectiva de Género en el proyecto?
Además de la sensibilización y la capacitación que siempre es permanente, se centró la transversalización en incorporar género en las herramientas de gestión con las cuales el gobierno trabaja; por ejemplo: en las encuestas de percepción del riesgo, en la aplicación de la metodología de la Cruz Roja para el análisis de vulnerabilidades y capacidades de la comunidad; en los espacios (aulas y cátedras) de capacitación y entrenamiento que coordina la universidad y el equipo de la Unidad de Medio Ambiente, etc.
También se ha promovido que se visibilice el tema, por ejemplo, a través de talleres participativos, donde se han puesto en evidencia las necesidades de las mujeres y cómo ellas realizan su actividad en todos los componentes de los sistemas de alerta temprana. Un trabajo que destaco es la elaboración de productos comunicativos como: el documental “FORSAT en voces de mujeres” y varios folletos como el de Mujeres en la Observación pluviométrica. Esto ha influido en elevar la percepción y el reconocimiento acerca del empoderamiento de las mujeres y de la importancia de su trabajo a la par de los hombres.
ALG: ¿Cuáles fueron los resultados obtenidos?
En esta tarea se obtienen importantes resultados de los que destacamos tres: Una mayor toma de conciencia sobre la importancia de trabajar desde el género para la gestión de riesgos de desastres y en particular para los sistemas de alerta temprana; la incorporación dimensiones de género en la Encuesta a la población sobre el riesgo de inundación por intensas lluvias; y el fortalecimiento de capacidades para realizar posteriormente los análisis y la gestión de riesgo con un adecuado enfoque de género.
También debe resaltarse que se fortaleció la alianza entre la Agencia de Medio Ambiente, las Unidades de Medio Ambiente territoriales, la Oficial de Género del PNUD y la Presidenta de la Cátedra de la Mujer de la Universidad de Sancti Spíritus; que no solo incide en nuestro proyecto, sino en futuros proyectos que realicemos, en general en toda nuestra labor.