Si bien el ámbito territorial es considerado un espacio esencial para el desarrollo social, económico y ambiental, prestar atención a la igualdad de género y al empoderamiento de las mujeres es a la vez una premisa y principio fundamental que la Plataforma Articulada de Desarrollo Integral Territorial en Cuba (PADIT) ha hecho suyo; conscientes de su relevancia para una mayor contribución al alcance de los Objetivos de Desarrollo Sostenible y la realización de los derechos de todas las personas
La Plataforma hoy trabaja en 32 municipios y 10 provincias cubanas (Pinar del Río, Artemisa, Cienfuegos, Holguín, Guantánamo, Sancti Spíritus, Santiago, Granma, Las Tunas y La Habana) es liderada por el Ministerio de Economía y Planificación (MEP), el Instituto Nacional de Investigaciones Económicas (INIE), el Instituto de Planificación Física (IPF) y el Ministerio del Comercio Exterior y la Inversión Extranjera (MINCEX), 13 instituciones asociadas académicas y de la sociedad civil organizada. Acompañado por PNUD en su implementación cuenta con el apoyo la Agencia Italiana para la Cooperación al Desarrollo (AICS), de la Agencia Suiza para el Desarrollo y la Cooperación (COSUDE), el Gobierno de Canadá, el Gobierno del Reino de Los Países Bajos.
PADIT, que constituye un marco de apoyo al desarrollo territorial para contribuir a las prioridades nacionales y específicas del país y al reforzamiento del papel y las capacidades de los gobiernos locales y provinciales, desde 2015 destaca, entre otros aspectos, por el liderazgo político de muchas mujeres que desempeñan relevantes roles en tanto importantes agentes y protagonistas del desarrollo.
Las mujeres en PADIT demuestran en general un alto nivel de participación institucional y comunitaria, que reconoce también los aportes que ellas hacen en la toma de decisiones y como ciudadanas. Entre las personas representantes de gobiernos territoriales en los grupos de trabajo provincial y municipal o en instituciones asociadas, son la mayoría; y son también mayoría entre quienes participan en las consultas públicas y las convocatorias del territorio. La participación de las mujeres en las reuniones de programa de la Secretaría Técnica y del Comité Nacional de Coordinación, además de resaltar numéricamente en cuanto a paridad, destaca por la calidad de sus contribuciones al desarrollo de los encuentros, tanto a nivel del uso de la palabra como de la atención que reciben las propuestas que ellas hacen, no encontrándose en condiciones de desventaja con respecto a los hombres participantes, para la toma de decisiones. A la vez, las mujeres son el 40% del total personas que son Directoras de proyecto en los territorios.
Pero nada mejor que dialogar con las propias voces de estas protagonistas que mucho tienen que ver con las decisiones de la Plataforma que se construye y dinamiza día a día, y a la cual entregan sus conocimientos, experiencias, relaciones de incidencia, sueños e ideas innovadoras. A continuación, un resumen de la entrevista realizada por Odett Domínguez Calvo de la Facultad de Comunicación de la Universidad de La Habana a dos de sus mujeres directivas y que fueron publicadas en los Boletines de PADIT.
UNA PLATAFORMA PARA EL HOY Y EL MAÑANA DE CUBA
ENTREVISTA A AIZEL LLANES, DIRECTORA DE POLÍTICAS TERRITORIALES DEL MINISTERIO DE ECONOMÍA Y PLANIFICACIÓN
“Cuando de entender las lógicas, el propósito y el sentir de la Plataforma Articulada para el Desarrollo Integral Territorial (PADIT) se trata, el nombre de Aizel Llanes suele ser frecuentemente una de las voces sugeridas. Conoce la iniciativa desde que comenzó a pensarse y defiende la esencia transformadora y educativa de la misma”.
“… Cuando pensamos en el nombre, queríamos que expresara claramente su significado. PADIT consiste en un programa marco que busca articular aquellos actores de los distintos niveles para alcanzar un desarrollo territorial, que también, ¿por qué no?, redundará en desarrollo nacional.
Es importante entender que la articulación no será solo entre los actores locales, ni nacionales, sino que todos trabajarán de manera conjunta para lograr las metas que se proponga un Consejo Popular, o un municipio, o una provincia.
Aunque hoy las dinámicas de PADIT se implementan en cuatro provincias: Pinar del Río, Artemisa, Cienfuegos y Holguín, creemos que esta experiencia se extenderá poco a poco al resto del país. Uno de los mayores aportes que dejará esta plataforma en el futuro es un insumo estrechamente relacionado con el programa de desarrollo que se traza el país hasta el 2030, cuya concepción del desarrollo territorial es también multinivel.
Muchas de las acciones que hemos realizado hasta hoy en PADIT nos proveerán de un arsenal de herramientas y soluciones para insertarnos, sin grandes dificultades, en el ámbito territorial del programa 2030.
Un ejemplo de esto es la creación de la herramienta municipal que se concibió en el marco de PADIT. Esta es una metodología propuesta por el Centro de Estudios de Desarrollo Local (CEDEL) para potenciar el desarrollo local y definir vías para su implementación y gestión. La herramienta fue discutida por un grupo técnico que incluyó a las cuatro provincias que integran hoy el experimento y a otras.
Bueno, esa herramienta, analizada en el taller convocado por el Instituto Nacional de Investigaciones Económica (INIE), se tomará como insumo en la proyección del desarrollo hasta el 2030 porque es coherente con este, solo habrá que hacer algunas adaptaciones en cuestiones metodológicas. El propósito es aplicarla en municipios con características diferentes: unos montañosos, otros turísticos; y así poderla validar.
Este es también el objetivo del programa 2030, buscar mecanismos macroeconómicos para que -de una manera directa o indirecta- se pueda influenciar en un organismo, territorio o en un municipio sin necesidad de que toda la aprobación sea de manera centralizada, de ahí que cobren gran importancia los cambios en el sistema de planificación.”
La mayoría de las instituciones asociadas a PADIT, también vinculadas a un proyecto que coordina el INIE, se concentran hoy en la capacitación de los actores municipales y provinciales para ayudarles a llevar a cabo ese proceso de descentralización. Esto es muy importante pues lo que quiere el país es que esa pirámide que hoy está invertida vuela a colocar el pico, es decir, el municipio, hacia arriba.
En este empeño de potenciar el desarrollo territorial, la información tiene también un papel muy importante. Muchas veces contamos con la infraestructura necesaria: radioemisoras, telecentros y medios locales, pero no se explota en este sentido pues con frecuencia esperamos que desde arriba nos digan lo que debemos hacer. Si aprovecháramos estas potencialidades, estoy segura de que lograríamos más con lo que tenemos.
Otra buena práctica que PADIT promueve es la del análisis del financiamiento en los territorios. Esto le hace bien al país porque hoy tenemos fuentes de financiamiento, los recursos llegan por diferentes vías pero como no tenemos la visión ni la integración de ellos como un todo, muchas veces no lo utilizamos como debiéramos, no lo aprovechamos al máximo.”
IMPULSAR PADIT:
UNA MANERA DE SOÑAR CUBA
ENTREVISTA A LISSET ROBAINA, COORDINADORA DE PADIT DESDE EL INIE
“Debido al vínculo con el INIE, para Lisset Robaina el trabajo en PADIT ha tenido dos frentes: Por una parte, el instituto es el que representa al proyecto nacional de PADIT y constituye un fundamento desde la gestión del conocimiento para la implementación de la plataforma, y por otro lado, conforma junto al MEP, el MINCEX (Ministerio de Comercio Exterior y la Inversión Extranjera y el IPF (Instituto de Planificación Física) el grupo de coordinación nacional que asesora metodológicamente a los territorios. La duplicidad de roles parece satisfacer en términos de crecimiento profesional a la investigadora”.
“En general, de cara al futuro creo que pudiera pensarse en una especie de oficina nacional dedicada a gestionar propiamente la plataforma, porque la responsabilidad será cada vez mayor. En la medida en que se incorporen provincias crecerá la demanda y, al menos para el INIE, constituirá un reto responder en cada caso.
Si pienso en fortalecer los grupos de trabajo es porque creo que PADIT tiene mucho para dar en la próxima etapa. En la siguiente fase aspiro a que la plataforma pueda escalar en contenido. Pudiéramos aportar más en el tema de la gestión integral de la financiación, contribuir con la territorialización de la Tarea Vida, cuyo modo de implementación aún no queda del todo claro.
En términos de capacitación nos queda el desafío de llevar los diplomados a los territorios y que las asignaturas y los contenidos no sean homogéneos, sino que se adapten a las características contextuales de cada lugar. Asimismo, sería pertinente profundizar en los conceptos de comunicación para el desarrollo, gobierno electrónico y gobierno abierto.
Hemos mantenido la implementación muy cercana a todo lo que en Cuba se norma y se permite: no violentamos procesos. En ese sentido, ha sido muy útil contar con el apoyo del PNUD, tan respetuoso de las dinámicas del país.
Tampoco negociaría la transparencia y comunicación con las instituciones y territorios, nos ha dado mucho resultado trabajar así.
De igual modo, sostendría la búsqueda tanto de referentes nacionales como internacionales para construir instrumentos y metodologías propias. Tenemos varias experiencias que validan la efectividad de este método.
El seminario internacional sobre descentralización y financiación para el desarrollo, realizado en la Facultad de Derecho de la Universidad de La Habana, nos ofreció la oportunidad de compartir con varios países de América Latina y Europa. Allí nos nutrimos de experiencias de contextos muy parecidos al cubano como Ecuador y Bolivia.
También vale la pena resaltar la permanencia y participación que ha tenido PADIT en los fórums internacionales, tanto regionales como mundiales de desarrollo territorial, con frecuencia cada dos años. Creo que esos encuentros se han traducido en cambios y renovación a favor de la plataforma. Justo un seminario metodológico realizado con la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL) constituyó el punto de partida para generar las herramientas de implementación de la estrategia municipal y la estrategia provincial.
En general creo que el cierre de la primera fase no tiene por qué significar una ruptura. Lo que ha funcionado hasta ahora debería mantenerse y aquello que podemos hacer mejor, pues lo perfeccionaremos”.
Como a Lisset, a otros actores y en particular jóvenes, se les nota el empeño por ser útiles al país y han descubierto en PADIT una plataforma para soñar, perfeccionar y construir juntos a Cuba y el desarrollo local que ella necesita.