Historias de lideresas de Colombia que impulsan la participación de más mujeres en la política. Cien mujeres poderosas: congresistas, gobernadoras, diputadas, alcaldesas y concejalas que participaron en la Cumbre Nacional por la Igualdad, el principal encuentro de discusión política sobre el estado y retos de la participación política de las mujeres, y la agenda en favor de sus derechos que debería asumir la bancada de mujeres en el Congreso de la República que se posesionará el próximo 20 de julio.
LA POLÍTICA DESDE LOS PEQUEÑOS LIDERAZGOS LOCALES
“Mi compromiso por la igualdad es que las mujeres del departamento del Tolima crean en sus propias capacidades. Hombres y mujeres se dan cuenta de las capacidades de las lideresas en sus territorios, pero ellas mismas a veces no confían. Iré con frecuencia al Tolima a decirles a ellas que sí podemos: que no somos simples requisitos para cumplir una cuota, sino que tenemos liderazgo y talento para hacer política, y hacerla bien”, dice Adriana Matiz Vargas, representante a la Cámara electa para el periodo 2018-2022.
Adriana Matiz Vargas, representante a la Cámara por Tolima.
Adriana fue la única mujer que llegó al Congreso por su departamento. Cuenta que, de 47 municipios del Tolima, sólo 3 son liderados por alcaldesas; y que de 15 diputados en la Asamblea Departamental, 2 son mujeres. “Y las tres alcaldesas y dos diputadas lo han hecho perfecto: ellas demuestran eficiencia, eficacia y transparencia en la gestión de lo público. Pero vemos que hay pocos espacios de representación ocupados por mujeres: mi compromiso es que se empoderen, que nuevas lideresas lleguen a cargos públicos y adquieran la doble responsabilidad de gobernar y hacerlo bien”, lo cual implica un ejemplo para las y los votantes, concluye la congresista Matiz Vargas, quien es abogada con maestría en gobierno municipal, y quien cuenta con 20 años de ejercicio en el servicio público, trabajos que le han permitido escalar hasta haberse convertido en la aspirante más votada de las pasadas elecciones en todo el Tolima.
Teresa Enríquez Rosero, representante a la Cámara por Nariño.
Similar trayectoria vivió Teresa Enríquez Rosero, quien surgió en la política desde los pequeños liderazgos locales y hoy es Representante a la Cámara por Nariño (suroccidente de Colombia). “Soy del corregimiento Chiles en Cumbal -Nariño-. Ser mujer rural me hizo apropiarme de las necesidades y limitaciones de las campesinas, por ejemplo, vivir dependiendo económicamente de los maridos. Tras estudiar la carrera de derecho, regresé al departamento decidida a promover empoderamiento y autonomía para las mujeres a través de huertos agroecológicos”, relató.
Momentos de la Cumbre Nacional #PorLaIgualdad
Desde hace 22 años, Teresa Enríquez se vinculó al trabajo en lo público desde el sector ambiental, destacando que con las mujeres de su región descubrió “un gran potencial asociativo para defender los recursos naturales. Las mujeres en los territorios están muy interesadas en liderar proyectos para proteger sus tierras, pues saben que así aseguran el bienestar para sus familias”, aseguró.
A través de estos proyectos, la lideresa aseguró semillas de confianza entre las comunidades rurales de Nariño. “Fueron esas asociaciones de protección ambiental las que me pidieron incursionar en política. No me interesaba mucho al comienzo, pero me convencieron que atender las necesidades sociales, ambientales y económicas de la ruralidad nariñense podría tener mayor impacto si se desarrollaban desde el Congreso”, añadió.
El compromiso por la igualdad que expuso Teresa Enríquez inicia por el empoderamiento de las mujeres rurales: fomentar la participación política para ellas uando se les dota de herramientas que les brinden autonomía. El liderazgo, insiste, es innato.
JÓVENES RENOVANDO LA POLÍTICA EN LAS REGIONES
María Isabel Moreno, diputada por el Valle del Cauca.
Desde muy joven, María Isabel Moreno descubrió esta vocación al servicio público que recorría su sangre. Nació hace 26 años en Yumbo, municipio del Valle del Cauca. Creyó que podía hacer una política distinta, renovadora y creativa. En su partido lideró una organización juvenil que invitara a nuevas generaciones a militar y discutir proyectos políticos.
A los 18 años se abrió paso como integrante de agrupaciones juveniles, y luego los lideró. En 2015 decidió participar en una carrera política y consiguió convertirse en Diputada de la Asamblea del Valle del Cauca. “Llegamos 9 mujeres a la Asamblea, y desde allí comenzamos a trabajar para romper paradigmas: en mi caso por ser tan joven y por ser mujer, pero con argumentos y trabajo conseguí estar en la mesa directiva de la corporación”.
Discusión sobre el marco institucional para la garantía de los derechos de las mujeres, moderado por el Área de Gobernabilidad Democrática del PNUD, en Cumbre Nacional por la Igualdad
Un esfuerzo similar ha logrado otra diputada del departamento de Antioquia, el segundo más poblado de Colombia. Ana Cristina Moreno es una de solo dos representantes mujeres en la Asamblea regional (26 diputados en total).
En su opinión, las mujeres poco a poco van adquiriendo más espacios de representación como resultado de una evolución cultural de la sociedad. “Cada vez hay más mujeres preparadas e interesadas en la política: antes probablemente se automarginaban o sufrían barreras impuestas por hombres para entrar a este escenario. Pero los muros se derrumban, y creo que va siendo más fácil que ocupemos espacios que merecemos”, dijo.
“Mi compromiso por la igualdad sigue siendo demostrar que las mujeres, por ser mujeres, no debemos tener debilidades o temores para ser políticas. Por el contrario: podemos ser ejemplos y motivadoras de liderazgo. Debemos comprometer a los partidos a fortalecer sus liderazgos desde las juventudes y motivar a hombres y mujeres por igual a que se comprometan con sus territorios”, estimó la diputada Moreno.
Diputada por Antioquia, Ana Cristina Moreno
UNA VIDA DE SERVICIO POTENCIADO COMO ALCALDESAS
El compromiso por la igualdad de las lideresas colombianas se complementa cuando este surge desde las bases territoriales. Historias como las de la alcaldesa de Chinú, Córdoba, Teresa Salamanca; o la mandataria de Sincé, Sucre, Lucy García Montes, pueden inspirar y potenciar mayores liderazgos políticos femeninos en la región Caribe (norte de Colombia)
La mandataria de Chinú -Córdoba-, Teresa Salamanca, inició su carrera política sin pensar llegar a cargos de decisión: lo hizo liderando proyectos de vivienda de interés social para su comunidad hace 15 años. Gestionaba recursos y terrenos para construir casas, sin pretensión de llegar a la política. “Pero la gente me motivó porque descubrieron que de esa forma podía gestionar y obtener más recursos para nuevos proyectos sociales. Aspiré al concejo, luego pasé a trabajar a la Gobernación y fui 22 veces gobernadora encargada, y tras adquirir experiencia, regresé al municipio con ganas de llevar más oportunidades de desarrollo, como alcaldesa”, sostuvo.
“Mi compromiso desde que llegué a la Alcaldía ha sido con la igualdad: perfeccionar nuestros potenciales, como lideresas organizadas, decididas y capaces. Tenemos pertenencia, pero falta más capacitación. Así que estoy liderando esfuerzos por descubrir lideresas naturales y garantizarles oportunidad de participar”, concluyó la alcaldesa.
La alcaldesa de Sincé -Sucre- Lucy García es bacterióloga y cuenta que: “en 20 años de ejercicio, tuve contacto cercano con la comunidad: escuché sus necesidades y decidí participar. Inicié en asociaciones de padres, luego en liderazgos con mi iglesia, y así salté a escenarios comunitarios. Como alcaldesa, mi compromiso por la igualdad inició al crear la Oficina Municipal de la Mujer: me concentro en la política pública para que la oficina funcione y ayude a empoderar a mujeres urbanas y rurales”.
HACIA LA PARIDAD, EL GRAN COMPROMISO
La Cumbre Nacional por la Igualdad sirvió como espacio de diálogo y apropiación de compromisos entre lideresas territoriales, representantes de organizaciones sociales, entidades del Estado, los partidos políticos y congresistas. Las principales conclusiones se centraron en cómo incrementar la participación de las mujeres para las próximas elecciones territoriales (2019), extendiendo llamados a partidos y dirigentes en la política para ofrecer garantías que lo permitan.
A la entrante bancada de mujeres en el Congreso también se hizo un llamado para impulsar agendas legislativas pendientes como la política pública de mujer rural, la reglamentación del principio de paridad, alternancia y universalidad que garantice que el 50% de cargos de elección popular y decisión política sean ocupados por hombres y el 50% adicional por mujeres, y la necesidad vincular a los hombres que están en la política para asumir entre toda la población estos compromisos por la igualdad.
Bogotá, Colombia