Nueva York, 22 de septiembre – Los gobiernos de varios países del Caribe están comenzando a reconstruir infraestructuras, casas y comunidades después del paso del huracán Irma que ha dejado incontables daños en varios países.

Después de experimentar varios días de retraso debido al paso del huracán María, el Gobierno de Barbuda inició labores de remoción de escombros el 21 de septiembre, con el apoyo técnico del PNUD para reconstruirse mejor, como parte de un amplia estrategia de ONU que vincula las áreas humanitarias y de desarrollo.

La experiencia del PNUD incluye el manejo y tratamiento de desechos médicos peligrosos, así como aspectos ambientales, como el reciclaje y la gestión de vertederos. Las iniciativas de dinero por trabajo empezarán en breve para inyectar el dinero necesario a las comunidades afectadas.

Más del 90 por ciento de los edificios fueron destruidos, incluyendo todas las instalaciones del gobierno. Los barbadenses viven temporalmente en la vecina Antigua hasta que puedan reanudar sus vidas en Barbuda.

En Cuba, como parte del plan de acción, el PNUD se suma al gobierno en la recuperación de más de 215.000 viviendas gravemente dañadas por el huracán Irma. El plan de recuperación de ONU se presentó esta semana en La Habana.

«El impacto del huracán Irma en Cuba fue enorme, por una serie de razones», explicó Denise Cook, Representante Residente del PNUD a.i. en Cuba en una entrevista con Noticias ONU. «No sólo fue muy poderoso, sino que también golpeó a todo el país durante mucho tiempo, en un espacio de tres días. Trece de sus quince provincias, particularmente en el norte, para las cuales el turismo es muy importante, fueron golpeadas. «

Cientos de casas fueron severamente afectadas. Algunas se derrumbaron mientras que otras perdieron sus techos. Esto causó que dos millones de personas tuvieran que ser evacuadas, y estar bajo situación de ‘alarma’, según Cook. Explicó así mismo que miles de personas fueron evacuadas, pero desafortunadamente 10 fallecieron, cifra muy alta para Cuba, considerando su vasta experiencia en preparación para huracanes.

Además del sector de la vivienda ha habido una gran afectación a los sistemas de agua, infraestructura eléctrica y el sector agrícola en todo el país. Las escuelas también sufrieron graves daños.

El apoyo del PNUD para ayudar a reconstruir a Cuba, como parte de la ONU en todo el plan de desarrollo humanitario incluye impulsar micro industrias de materiales de construcción para ayudar a recuperar cientos de miles de casas, afirmó Soledad Bauza, Representante Residente Adjunta del PNUD en Cuba, a Noticias ONU.

«También estamos apoyando al país a mejorar sus sistemas de alerta temprana», agregó Bauza, considerando que todos los países del Caribe están expuestos a huracanes cada año.

El PNUD ha inyectado U$ 700.000 para apoyar la reconstrucción de Cuba. Se necesitarán más de US$ 23 millones para ayudar plenamente en el proceso de recuperación, según el plan de acción lanzado esta semana en La Habana.