¿QUÉ SUCEDERÍA SI LAS MUJERES TUVIERAN IGUALDAD LABORAL REAL EN COSTA RICA?
¿QUÉ SUCEDERÍA SI LAS MUJERES TUVIERAN IGUALDAD LABORAL REAL EN COSTA RICA?
La pregunta se la hizo el Informe del Estado de la Nación en el 2018, concluyendo que si el país centroamericano llegara a contratar a las mujeres que en este momento están desocupadas, bajaría a la mitad el porcentaje de hogares pobres. En otras palabras, el aumentar la participación laboral de las mujeres es la esperanza nacional para bajar la pobreza y reducir el desempleo.
Sin embargo, Costa Rica es el cuarto país de América Latina con menor participación laboral femenina, según la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL), pues la desigualdad y las barreras para conseguir trabajo persisten.
En el 2018, la brecha de participación laboral comparada con la de los hombres, sobrepasó los 25 puntos porcentuales a favor de éstos.
La injusta distribución de los trabajos domésticos no remunerados y el ser las principales responsables del cuido de otras personas, también forman parte de las barreras que están alejando a las mujeres de las opciones laborales. Los datos demuestran que la carga de trabajo doméstico no pagado para las mujeres es de 35 horas y 49 minutos y para los hombres apenas alcanza las 13 horas con 42 minutos, según la Encuesta Nacional de Uso del Tiempo en Costa Rica (2017).
Además de que son menos las mujeres contratadas, las que tienen empleo siguen ganando mucho menos que los hombres. Según el Estado de la Nación (2018), la brecha salarial -calculada mensualmente- se ha movido en Costa Rica entre un 17% y un 12%, en los últimos 5 años. Y el porcentaje de empleo informal de las mujeres es 13% más que el porcentaje de los hombres.
¿QUÉ PUEDEN HACER LAS EMPRESAS?
Ante esta realidad, necesitamos lograr que el sector empleador se comprometa con la igualdad de género en el trabajo y el empoderamiento económico de las mujeres. La formula: un Sistema de Gestión para la Igualdad de Género en las organizaciones privadas y públicas.
El Sistema se basa en los modelos de las Normas ISO y su aplicación recorre similares procesos. Para su operación se creó en el país la norma nacional INTE G38:2015. El Instituto Nacional de las Mujeres (INAMU) en conjunto con el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD), se aliaron estratégicamente para construir el instrumental normativo y técnico que permite su implementación.
De esta manera, la organización que decide certificarse hace un inventario de sus condiciones o un diagnóstico de brechas en materia de igualdad. Después de este proceso crea un plan de acción para atender estas brechas y se somete a la auditoria de una tercera parte (el organismo certificador). Si la organización cumple con los requisitos de la Norma, se hace acreedora de la certificación y finalmente el INAMU le otorga el Sello de Igualdad de Género.
La existencia de un Sistema de Gestión para la Igualdad de Género permite que las empresas e instituciones en el país tengan un marco de referencia claro para realizar acciones que ayuden a cerrar las brechas entre hombres y mujeres.
LA IGUALDAD SÍ ES UN TEMA DE NEGOCIOS
Los datos reflejan que las empresas con prácticas de talento incluyentes generan hasta un 30% de ingresos más altos y mayor rentabilidad que sus competidores, según un informe de Deloitte del 2017. Y en América Latina, un estudio de McKinsey & Company comprueba que las compañías con al menos una mujer en sus juntas directivas tienen rendimientos 44% más altos.
Las organizaciones líderes ven la diversidad y la inclusión como una estrategia integral, parte de su cultura y filosofía corporativa. Más que un simple programa de Responsabilidad Social Empresarial o una función accesoria del área de Recursos Humanos, la inclusión se asume desde las altas instancias y se impulsa internamente a todos los niveles.
Las empresas que han seguido la ruta propuesta por el Sistema de Gestión para la Igualdad de Género aseguran trabajar integralmente cubriendo temas como la corresponsabilidad social de los cuidados, la eliminación de las brechas salariales, la gestión del personal sin discriminación y la promoción de ambientes laborales saludables, entre otros.
En Costa Rica, a la fecha dos empresas han logrado certificarse bajo este esquema para obtener el Sello y cerca de 103 más están en algún nivel del proceso a la certificación.
TRAVEL EXCELLENCE: LA PRIMERA EMPRESA COSTARRICENSE EN CERTIFICARSE
La compañía nacional nació en 1996 como una tour operadora y agencia de turismo. Desde entonces, su junta directiva ha sido conformada por dos mujeres y dos hombres. “Desde su constitución, la empresa fue pensada desde una perspectiva de igualdad en cuanto a la participación de las mujeres”, menciona Luis Alberto Blanco, gerente de Recursos Humanos.
En los pasillos de la compañía están colgadas las muchas certificaciones nacionales que acreditan que para la empresa ha sido prioridad trabajar por la sostenibilidad ambiental y asumir su cuota en términos del desarrollo social.
En el 2017, se convirtieron en la primera empresa en recibir del INAMU el Sello de Igualdad de Género, gracias a que la compañía se propuso cambios en el funcionamiento de sus operaciones para asegurar la igualdad de género en todos sus procesos. Por ejemplo, implementar la licencia de paternidad para promover la corresponsabilidad de los cuidados entre hombres y mujeres, así como los permisos familiares por diversos y justificados motivos. También ha implementado políticas estrictas contra el hostigamiento sexual y el acoso laboral, así como prácticas para asegurar ambientes de trabajo seguros y saludables.
Abigail Jiménez es una de las mujeres jóvenes trabajando en la compañía. Asegura que entre las factores que atraen al nuevo talento está la capacidad de la organización de ofrecer condiciones equitativas para hombres y mujeres y espacios libres de violencia y discriminación.
“Yo formo parte de una nueva generación de personas que elegimos trabajar para aquellas empresas con las cuales tenemos coincidencias en cuanto valores. Cada vez se vuelve más importante –más que el tema salarial– que las compañías promuevan una cultura de respeto y promoción de las diversidades.
Finalmente, uno de los temas incluidos en la norma y trabajados por Travel Excellence se refiere a la incidencia que la empresa pueda tener sobre su red de suplidores de servicios, al invitarlos a adoptar buenas prácticas en igualdad de género y apoyar a mujeres empresarias del país.
Al respecto, la Organización Mundial de Turismo (OMT) ha señalado que las mujeres están aprovechando el potencial del turismo para ser económicamente independientes, combatir los estereotipos e iniciar sus propios negocios, pues el turismo ofrece a las mujeres más oportunidades para emprender que la economía en su conjunto.
HOLCIM COSTA RICA, CONSTRUYENDO IGUALDAD
La segunda empresa en certificarse en Costa Rica fue la multinacional Holcim, la cual se convirtió en la primera compañía del sector industrial en recibir el Sello de Igualdad de Género en el país.
La Encuesta Nacional a Empresas del Instituto Nacional de Censos (INEC) en Costa Rica, refleja que el sector Industrial continúa enfrentando desafíos importantes en cuanto a la integración de las mujeres pues, según los datos, en 2017 por cada 100 personas que trabajaban en el sector industrial y de manufactura, sólo el 25% eran mujeres.
Y fue precisamente el formar parte de un sector tradicionalmente masculinizado lo que impulsó a la compañía a lograr una verdadera cultura de Equidad del Talento y promover un ambiente organizacional con igualdad de condiciones.
Holcim ha implementado distintos cambios en su gestión para asegurar que la igualdad de género esté presente en todos los ámbitos de la empresa. Por ejemplo, la implementación de licencias de paternidad, así como una subvención económica para personas con responsabilidades de cuido. El esquema de subsidios varía dependiendo del nivel del puesto, llegando a ser del 100% para las personas operarias.
Verónica Zigante, Representante país y Directora de Recursos Humanos para Centroamérica de Holcim, manifestó que para la empresa el desafío iniciaba después de obtenida la certificación, al mantener la coherencia entre lo que hace la compañía internamente, cómo se relaciona y cómo realmente le abre más oportunidades a mujeres en todos los puestos de la compañía.
Fuente: https://sellodeigualdadgenero.exposure.co/promoviendo-la-igualdad-de-genero-en-el-empleo