La mutilación genital femenina refleja y refuerza la discriminación hacia las mujeres y las niñas y genera graves afectaciones a su vida y su salud. Colombia es el único país de la región de América Latina y el Caribe donde se ha reconocido la existencia de esta práctica.

 

La mutilación genital femenina (MGF) comprende todos los procedimientos que alteran o lesionan los órganos genitales femeninos. Las causas principales son una mezcla de factores culturales, religiosos y sociales existentes en familias y comunidades. Suele estar motivada por creencias acerca de lo que se considera como un comportamiento sexual adecuado, relacionándose los procedimientos con la virginidad prematrimonial y la fidelidad matrimonial. En múltiples comunidades se considera que la MGF reduce la libido femenina, ayudando a la mujer a resistirse a los actos sexuales «ilícitos».

La MGF es reconocida internacionalmente como una violación de los derechos humanos de las mujeres y niñas. Refleja una desigualdad entre los sexos muy arraigada, y constituye una forma extrema de discriminación contra mujeres y niñas. La práctica viola los derechos a la salud, la seguridad y la integridad física, el derecho a no ser sometidas a torturas y tratos crueles, inhumanos o degradantes, y el derecho a la vida, en los casos en que el procedimiento acaba produciendo la muerte.

Reto 2030: terminar con la MGF en Colombia

En el marco de la conmemoración del «Día Internacional de Tolerancia Cero con la mutilación genital femenina» (6 de febrero), el Fondo de Población de las Naciones Unidas (UNFPA), el Fondo para la Infancia de Naciones Unidas (UNICEF), la Organización Panamericana de la Salud (OPS), el Instituto Colombiano de Bienestar Familiar (ICBF) y la Organización Nacional Indígena de Colombia (ONIC) presentan los retos globales que enfrenta Colombia para erradicar ésta práctica para el 2030.

Colombia es el único país de la región de América Latina y el Caribe en donde se ha reconocido la existencia de esta práctica, concretamente en la comunidad del pueblo indígena Embera.

No obstante, se han llevado a cabo grandes avances y pueden reconocerse el trabajo en la sensibilización y el diálogo intercultural entre organizaciones indígenas, organizaciones nacionales e internacionales, así como el compromiso del Estado en su erradicación.

Avanzar en la erradicación de la MGF implica:

1. Dar grandes pasos hacia la igualdad de género y el empoderamiento de las mujeres, lo cual involucra la eliminación de las violencias contra las mujeres, reducir la mortalidad infantil y materna, y mejorar el acceso a la salud sexual y reproductiva de las mujeres indígenas.

2. Fortalecer las capacidades de las comunidades indígenas, parteras e instituciones para garantizar el acceso de las mujeres y niñas a servicios de salud sexual y reproductiva de calidad e interculturales.

3. Poner en marcha el Plan Nacional para la erradicación de prácticas nocivas para la vida y la salud de las mujeres y niñas indígenas que ha sido concertado interinstitucionalmente y con las principales Organizaciones Indígenas.

4. Fomentar la participación activa de las Autoridades Indígenas a nivel nacional y regional.

5. Contar con información sobre la magnitud de esta práctica en el país, así como con el registro, documentación y datos sobre los casos de MGF.

La nueva agenda de Desarrollo Sostenible reconoce a la MGF como una preocupación mundial, por lo que Colombia enfrenta grandes retos para alcanzar la meta de «Eliminar todas las prácticas nocivas, como el matrimonio infantil, precoz y forzado y la mutilación genital femenina» en el 2030, para el cumplimiento del Objetivo N° 5 dirigido a «Lograr la igualdad entre los géneros y el empoderamiento de todas las mujeres y niñas».

Hechos y cifras a nivel mundial

  • Se calcula que hay al menos 200 millones de niñas y mujeres mutiladas (De las cuales 44 millones son menores de 14 años)
  • Los países con la prevalencia más alta entre mujeres y niñas entre 15 y 49 años son Somalia (58%), Guinea (97%) y Djibouti (93%).
  • Si la tendencia actual continúa, para 2030 aproximadamente 86 millones de niñas en todo el mundo sufrirán algún tipo de mutilación genital.
  • La mutilación genital femenina es causa de hemorragias graves y otros problemas de salud tales como quistes, infecciones e infertilidad, así como complicaciones en el parto y un mayor riesgo de muerte de recién nacidos.
  • La mutilación genital femenina es una violación de los derechos humanos de las niñas y las mujeres.

Fuentes del artículo:

Organización Nacional Indígena de Colombia (ONIC) VER

ONU – «Día internacional de tolerancia cero con la mutilación genital femenina» VER

UNICEF – #Stop MGF VER

UNFPA – Mutilación genital femenina VER

OMS – Mutilación genital femanina VER

Periódico colombiano La Opinion VER